Actualmente vivimos en una sociedad donde los cánones de belleza vienen marcados por modelos, presentadores de televisión, actores…que además de tener unas características físicas envidiables, en la gran mayoría de casos lucen hermosas sonrisas con dientes totalmente alineados y blancos. Es esa la estética dental que muchos de nuestros pacientes desean alcanzar. De todas las cualidades estéticas que se plasman en estas sonrisas de revista, la que más suele llamar la atención es la tonalidad blanca de los dientes que en ellas se muestran, pero ese color ¿es resultado sólo de un tratamiento de blanqueamiento dental?
Hoy tratamos de responder a una pregunta muy común en nuestro gabinete:
¿Qué es mejor para que mis dientes luzcan blancos?
Los casos de blancorexia u obsesión por unos dientes blancos son cada vez más frecuentes y esto nos preocupa, pues no todos los casos en los que queremos aclarar el color de nuestros dientes, el tratamiento indicado es el blanqueamiento dental y hay quienes, movidos por esta obsesión, llegan a ponerse en manos de personal no cualificado o realizar tratamientos sin la supervisión correspondiente. Recuerda que el primer paso y el más importante es el correcto diagnóstico por parte del odontólogo para poder determinar cuál es el tratamiento en cada caso.
Si no presentas ningún tipo de discromía dental asociada a consumo de determinados medicamentos o a determinadas enfermedades, pero el tono de tus dientes te disgusta, son varias las opciones de tratamiento, dependiendo de:
Si tienes tinciones extrínsecas
Muchas veces nuestros dientes adquieren un color marrón, verdoso o amarillento, resultado de tinciones extrínsecas que, como ya describimos en un post anterior, se deben al depósito de sustancias pigmentantes sobre nuestros dientes. Este es el caso de los pacientes fumadores donde son la nicotina y el alquitrán los responsables del color marrón. El aspecto amarillento por ejemplo puede deberse a depósitos de sarro. Es por esto que conseguimos aclarar bastante los dientes con una primera fase de limpieza bucal en el gabinete odontológico.
Si el color de tus dientes no posee sustancias pigmentantes
Puede ser que no tengas depósitos de pigmentos que coloreen tus dientes pero que aun así el color que tienes no cumpla tus expectativas estéticas. Podemos en estos casos realizar un aclaramiento dental mediante un tratamiento de blanqueamiento. Tratamiento que puede ser ambulatorio o domiciliario (en gabinete dental o en casa) o combinado como hacemos en nuestra clínica dental. Mediante la aplicación de peróxido de hidrógeno o peróxido de carbamida a determinadas concentraciones conseguiremos aclarar los dientes. Con este tratamiento solo estamos solventando el problema del color pero no podremos corregir desalineamientos o alteraciones en la forma de los dientes. En esos casos, siempre es aconsejable que sigas el tratamiento de ortodoncia adecuado.
Si se formaron pigmentos en los dientes a lo largo de su fase de desarrollo
Hay situaciones en las que nuestros pacientes tienen tinciones muchos más intensas y de carácter intrínseco (los pigmentos se depositaron en el diente durante su formación) donde el blanqueamiento dental por sí solo no solucionará el problema, pero si es un paso fundamental en su resolución. En estas situaciones el blanqueamiento es el primer paso, ya que con él conseguimos un tono mucho más claro. Si los dientes por ejemplo, se caracterizan por tener bandas de tono marrón o gris, como ocurre en las tinciones por tetraciclinas, conseguiremos que esas bandas pasen a marrón y gris claro. Esto nos permitirá emplear carillas cerámicas o de composite del menor grosor posible, para llegar al tono de blanco que el paciente desea.
Si además de blanqueamiento, quieres corregir la forma de tus dientes
Algo similar ocurre en los casos de pequeños apiñamientos, malposiciones mínimas o en casos de alteraciones de la forma (dientes conoides por ejemplo) donde además queremos unos dientes más blancos. En estos casos, combinaremos el tratamiento de blanqueamiento dental y el uso de carillas. Con el blanqueamiento conseguiremos dientes más claros que nos permitirán corregir la forma y/o la posición de los mismos con laminados cerámicos muy finos o carillas finas de composite.
Por tanto, cuando el problema tiene su origen en el color de los dientes y no está asociado a tinciones importantes, el tratamiento de elección es el blanqueamiento dental. En el momento que la tinción es intensa o el problema de color y de forma (desalineamiento) se unen, tendremos que combinar el blanqueamiento dental con el uso de carillas.
Si tienes alguna duda o quieres saber más sobre el blanqueamiento dental y su tratamiento, puedes echar un vistazo a nuestro post de verdades y mentiras sobre el blanqueamiento dental.
Una respuesta a «¿Qué es mejor el blanqueamiento dental o las carillas?»
[…] debe confundirse con las férulas termoplásticas, que se utilizan comúnmente en las técnicas de blanqueamiento dental. También se utilizan para el mantenimiento temporal después de un tratamiento de […]